viernes, 31 de octubre de 2008

Paso a paso

Soplaba las cuerdas con sus dedos, eso creía cuando mi centro estaba en su sonido y la sensación de lo imposible se volvía tangible frente a mi franca torpeza inicial.

Luciérnagas volando entre las líneas del pentagrama, acudiendo como señales en el curso melódico de cada frase.
Eso imaginaba, mientras se escurrían los compases del mismo estudio (fácil) que en la semana, batallaban contra mi descordinada voluntad.

Como los primeros pasos de un bebé, trastabillando intentos en derrapes luciferinos de futuro y animando sonrisas puras de inocencia.

2 comentarios:

Xi dijo...

Y bueno, ahora, con el pulgar cortado con un vidrio (no es metáfora, sino horrible realidad que me tiene con la huella digital partida en dos), se hacen más difíciles los progresos. Las cuerdas de la garganta son más dóciles. Las de la madera, durarán más que yo. Son más nobles.

Paso a paso, dedo a dedo, arpegio tras arpegio. Y colgando de la primera cuerda, mis ganas de música para inventar. De piezas en guitarra para guardar. De penas para barrer. De melodías para llevar.

Gracias por el "cling d'oeil", que decimos los franceses :-P

Besos sin cejillo.

Xi.

silente dijo...

No quiero saber cómo fué el accidental corte!!!je, A cuidarse que crear música se vuelve más fácil con los deditos sanos.

Besos afinados